Cuando nos preguntan, cómo estás? ¿qué contestas?
Dejemos por un momento las lamentaciones y olvidemos un poco nuestros problemas, para dar paso a las buenas noticias!
Rompe ese hábito, deja lo negativo, lo triste, lo que te deprime, y no hables más de eso!
Empieza a alegrar tus pláticas y conversaciones con lo positivo que te rodea, con las bendiciones que Dios te ha dado, con las alegrías que te dan ciertas situaciones.
A la gente le gusta hablar con gente positiva, con gente que los contagie de su felicidad, con personas que ven el lado bueno alas situaciones, sé TÚ uno más y disfrutarás más la vida.
Cómo estás? MUY BIEN, gracias a Dios, con la bendición de un día más de vida y con mi sentidos y mi cuerpo listos para disfrutar el hermoso día de HOY ... Sé Feliz!
No hay comentarios:
Publicar un comentario